El ex comentarista y relator Milton Millas, que estuvo presente hace 30 años en el Estadio Maracaná para el duelo entre Brasil y Chile por las Clasificatorias a Italia 1990, recordó el episodio del tristemente célebre “bengalazo” y señaló que, a su juicio, hubo una lección que causó más honestidad por parte de los jugadores.

Millas contó que tuvo al técnico de la Roja en ese entonces, Orlando Aravena, en la cabina, por que “estaba castigado, le planteé que por qué no se iba ahí para que estuviera más seguro y yo le prestaba un walkie-talkie para comunicarse con Oscar Wirth para las instrucciones, algo que accedió. Al principio estaba metido en el partido, y yo le pasaba el micrófono para que diera apuntes o un comentario”.

“Después, cuando daba instrucciones por walkie-talkie, me preguntó qué pasó, ‘la bengala', le digo; ‘¿y le pegó?', ‘yo creo que no le pegó', le digo al aire, pero luego con toda la trifulca, la sangre, y el ‘Pato' Yáñez y los jugadores que se querían retirar a toda costa, después de eso, Aravena se sentó en el suelo porque miraba a la gente en la tribuna”, agregó Al Aire Libre en Cooperativa.

“Pedimos que nos fuera a buscar la policía cuando había terminado el partido y luego Sergio Stoppel (presidente de la ANFP) le dijo que Oscar Wirth le pasó el walkie-talkie para decir que el equipo se retiraba de la cancha bajo su responsabilidad”, relató.

Tras la narración del suceso, Millas reflexionó y afirmó que actualmente “hay una lección y un cambio originado por la tecnología, de la trampa chica, esa trampa rioplatense que se acogía más que la manera de jugar”.

“Yo creo que hoy hay más honestidad y los jugadores entienden que la actividad no puede basarse en la trampa, en la mentira; el fútbol es más físico, se han acortado las distancias entre los buenos y los malos, los chicos y los grandes, creo que es más limpio el fútbol hoy en día”, señaló.