La selección brasileña arrancó la defensa del oro en el torneo de fútbol masculino en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, con una goleada por 4-2 sobre una errática Alemania en el Estadio Internacional de Yokohama.

El Scratch, campeón en Río de Janeiro 2016 justamente en la final ante los germanos, fue una aplanadora en la primera media hora, con Richarlison como punta de lanza en una ofensiva que dejó en evidencia las fallas defensivas de los europeos.

Richarlison, con su velocidad y talento, marcó tres golazos. El primero, a los 7', fue tras rematar en dos ocasiones tras la atajada del portero Müller; el segundo, un gran cabezazo en área chica (22'), y el tercero, una joyita en la media hora , al disparar con borde interno y colocarla en un punto inatajable para el meta rival.

El juego ofensivo de Brasil continuó y pudo irse con otro gol más al descanso, pero Matheus Cunha falló un tiro penal, que elevó la moral alemana en el entretiempo.

Para la segunda parte, Brasil se durmió y Alemania, con un bajísimo nivel, se encontró con el descuento de Amiri. El volante le pegó de primera en un rebote y el árquero Santos se comió el gol con una débil reacción (57').

Cuando parecía que Alemania encontraba la ruta para la remontada, llegó lo peor: el capitán Maximilian Arnold cometió una dura falta contra Dani Alves y recibió su segunda amarilla, dejando el equipo con 10 hombres.

Aún así, con un jugador menos, Alemania anotór otro descuento, con un cabezazo de Ragnar Ache (84'), y se ilusionó con el empate.

No obstante, Brasil nuevamente pisó el acelerador y justo antes del pitazo final, Paulinho con un golazo de derecha liquidó el partido (90+3').

Con el resultado, Brasil quedó líder del Grupo D, junto con Costa de Marfil, que venció por 2-1 a Arabia Saudita.

En la próxima jornada, Brasil jugará ante Costa de Marfil, mientras que Alemania hará lo propio ante el conjunto árabe.