Pablo Lemoine, entrenador de la selección chilena de rugby XV, conversó con Al Aire Libre en Cooperativa tras la ajustada caída ante Rumania, en el primero de sus tres amistosos en la ventana internacional de noviembre, pensando en el Mundial 2023.

"Estoy contento con algunas cosas y preocupado con otras. Definitivamente no pudimos armar esa cohesión que necesita un equipo de rugby. Si no se une es muy difícil. El nivel de demanda física de los jugadores fue muy alto, tuvimos el tema de la falta de coordinación y creo que se notó mucho", indicó.

"Nos hicieron puntos muy fáciles. Recuperamos pelotas a cinco metros de nuestro in-goal y eso te levanta mucho, pero después nos metían un try sin mayor esfuerzo. Esos detalles fueron carcomiendo un poco la estrategia", analizó.

"La energía y la rebeldía es la mejor parte de la historia, y me gustaría quedarme con eso. Lo que pretendo es que el equipo crezca estratégicamente, esa va a ser la clave. Se está aprendiendo mucho", agregó respecto a la gira.

También se refirió al desempeño de sus jugadores, indicando que "se notó en algunos chicos la falta de rugby, sobre todo los que venían de lesiones o no fueron a la gira a Brasil". El estratega sumó que el proceso "es una construcción a largo plazo, nunca habíamos tenido rivales como estos".

"El referato también fue importante, otra forma, menos permisivo. En Sudamérica nos está faltando mejorar eso, son otros réferis, funcionan de otra manera. Hay que aprender", cerró.