La relación entre Juan Román Riquelme y Lionel Messi en la selección argentina no es buena, coinciden los enviados de la prensa deportiva de Buenos Aires a Belo Horizonte, donde los albicelestes chocarán con Brasil en la sexta fecha de las clasificatorias del Mundial 2010.

 

Hasta que el equipo que dirige Alfio Basile viajó a Brasil no había indicios de problemas internos, pero las versiones sobre "celos" entre ambos jugadores encendieron todas las alarmas horas antes del encuentro que se disputará este miércoles en el estadio Mineirao de Belo Horizonte.

 

Julio Grondona, presidente de la Asociación el Fútbol Argentino

(AFA), negó, cuando la selección igualó con Ecuador (1-1) haya ido al vestuario a decirle a Lionel Messi que se haga cargo en el campo del liderazgo del equipo. Los rumores señalaban al dirigente como partícipe en el conflicto.

 

"Es una estupidez que no voy a desmentir porque jamás estuve en el vestuario. Hace seis meses que no hablo con la prensa porque inventan cosas", soltó Grondona.

 

Sin embargo, el diario Clarín afirma que el dirigente sí estuvo en el vestuario argentino antes de ese encuentro.

 

"Es un invento más que me ponen en el camino", dijo Riquelme en

Belo Horizonte ante una consulta de un periodista.

 

De Messi se indica que no está a gusto con el trato que tiene con él el futbolista del Boca Juniors, incluso se afirma "que ya no lo soporta", pero el delantero de FC Barcelona no ha emitido declaraciones y se ha mantenido a distancia prudencial de la prensa.

 

"Debe ser porque no le caigo bien a mucha gente", añadió Riquelme, al referirse al supuesto "invento".

 

De inmediato, los medios argentinos recordaron que el volante creativo también fue el eje, recientemente, de un presunto conflicto en el plantel de Boca Juniors cuando el equipo quedó fuera de la final de la Copa Libertadores, eliminado por Fluminense.

 

Riquelme "está un poco fastidioso", dijo a EFE una fuente del equipo xeneize.

 

Este no es el único caso que tiene "tensionado" el ambiente en la selección argentina ya que en Buenos Aires llamó la atención que el volante Juan Sebastián Verón, lesionado, no haya viajado a Brasil, como sí lo hicieron el defensa Martín Demichelis, suspendido, y Esteban Cambiasso, también lesionado.

 

Los medios bonaerenses comentan sobre la posibilidad de que Verón haya decidido quedarse en su casa, incómodo por la situación interna del plantel albiceleste, asegurando de paso, que el jugador del Estudiantes de La Plata es más cercano a Messi que de Riquelme. (EFE)