En la ocasión, el subsecretario de Deportes, Arturo Salah, explicó los objetivos del proyecto que se tramita en la Cámara de Diputados. Afirmó que busca “sincerar una actividad que bajo la etiqueta de ‘sin fines de lucro' realiza una importante operación lucrativa a nivel económico”.

La norma tendrá carácter obligatorio para los clubes que se constituyan con posterioridad a su promulgación, y para aquellos que no cumplan con las exigencias establecidas.

Así, será voluntaria para las corporaciones que muestren un balance positivo los dos últimos años calendario, cumplan con el pago de todas las obligaciones laborales y previsionales de sus trabajadores, y cuenten con garantías individuales o colectivas.

Tras el trámite de dos meses en la comisión de Economía, el proyecto de ley pasará fugazmente por la comisión de Educación, Deportes y Recreación, para llegar hasta la comisión de Hacienda, en donde se analizarán exclusivamente los puntos referidos al tema presupuestario.

Luego, la iniciativa podría ser votada en el plenario de la Cámara de Diputados y estaría lista para pasar al Senado.

Ante esta posibilidad, las expectativas oficialistas para la aprobación y posterior promulgación de la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales, variaron de un año (que era la meta original) a tan sólo seis meses, y así lo dio a conocer Heraldo Muñoz.

“Ha sido un poco más rápido de lo que yo pensaba. En la comisión de Economía tuvimos una discusión muy detallada, y lo que más me satisfizo es que hubo consenso en todos los partidos políticos, encontrando soluciones cada vez que había un artículo que suscitaba dudas. Si hay el mismo clima y la misma disposición, podemos llegar a que hacia mediados del próximo año (la ley) pueda ser realidad”, sostuvo el ministro en el seminario organizado por Chiledeportes y el Consejo Superior de Deportes de España.

Nuevos aires para el fútbol chileno

El presidente de Renovación Nacional (RN) y empresario, Sebastián Piñera, fue uno de los gestores de la iniciativa de introducir las sociedades anónimas en el deporte en 1998. Junto con criticar el actual sistema, al que catalogó de obsoleto y de incentivar gestiones oscuras y deficientes, explicó los beneficios del proyecto de ley. Aseguró que más que buscar el afán de lucro, lo que calificó como algo absolutamente legítimo, servirá para estimular la función social del deporte.

Piñera planteó la importancia de que el Estado establezca incentivos tributarios a quienes a futuro inviertan recursos propios en el mundo del deporte. “El Estado va a ahorrar mucha plata si logra recuperar el fútbol como centro de atracción y de encuentro de la juventud. Un subsidio sería una buena inversión en lugar de estar gastando fortunas en procesos de rehabilitación de alcoholismo, droga o delincuencia”, sostuvo.

“Llegó el momento de darse cuenta que la actual estructura del fútbol está en absoluta crisis, que ha fracasado rotundamente y que requiere innovación, modernización e imaginación. Las sociedades anónimas deportivas van a traer nuevos aires al fútbol chileno, mejor calidad de gestión, mayor responsabilidad y mayor transparencia, para que vuelva a ser lo que tiene que ser: pasión de multitudes”, sentenció el ex senador.

La jornada contó con la participación de Carlos Del Campo, secretario general de la Liga Española de Fútbol; Andrés Berlinches, instructor español de la FIFA; Gabrielle Turquelli, representante italiano; y Fernando Carlín, dirigente del club Magallanes. Los expositores dieron a conocer la experiencia de las sociedades anónimas en sus países, y en el caso de Carlín, lo vivido por Magallanes para convertirse en el primer equipo profesional chileno que se rige por esta modalidad desde hace un par de años.