El balista nacional Marco Antonio Verni una vez más no estuvo a la altura en una cita olímpica y quedó eliminado prematuramente de Beijing 2008 tras marcar 17,96 metros en el segundo tiro, su único lanzamiento válido.
Verni quedó ubicado en el último lugar de su serie y su registro fue sobrepasado ampliamente por los competidores que consiguieron avanzar a la siguiente ronda.
El atleta se presentó a los Juegos Olímpicos aquejado por una hernia discal, lo que afectó de sobremanera su desempeño en la fase clasificatoria.
El deportista asesorado por Gert Weil llegaba a la capital china antecedido por una decepcionante actuación en Atenas 2004, donde sus tres envíos resultaron nulos.