Argentina ganaba el partido hasta el minuto 90 gracias al gol de Lisandro Martínez en el primer tiempo. Y ya pensaba en semifinales, más cuando Enner Valencia desperdició un penal a los 62’, y sacaba cálculos si sería Canadá o Venezuela su próximo rival. Pero Kevin Rodríguez en el adicional logró la paridad, con mucha incertidumbre de por medio, porque el gol debió corroborarlo el VAR.

Por reglamento, la Copa América ya no va a tiempo extra. Los penales son el camino directo luego de una paridad, por lo que aun así los argentinos confiaban en las capacidades de Emiliano Martínez, por ser un experto atajando tiros desde los doce pasos.

Messi y su penal perdido

El astro argentino, Lionel Messi, quiso ser el primer ejecutante, y optó por ‘picar’ la pelota. Pero Alexander Domínguez que veía cómo se iba el tiro lejos de él, suspiró aliviado cuando el horizontal le dijo que no a la Pulga, quien de inmediato mostró su desazón que se sumó a la de los hinchas argentinos, que recordaron que allí en Estados Unidos un lanzamiento desperdiciado por su ídolo frente a Chile les quitó la Copa América Centenario.

Los fantasms para Messi y los Albicelestes afloraron, pero tenían al Dibu Martínez, que atajó dos penales, puso a Argentina en semifinales, y salvó de una nueva tristeza  a su capitán.