Manchester City sufrió un duro tropiezo este domingo al caer como local por 2-0 ante Wolverhampton en la octava fecha de la Premier League, derrota que les significó ceder terreno en la lucha por el liderato del torneo.
Pese a ser dominadores en las acciones de peligro y la posesión del balón, el equipo de Claudio Bravo, que estuvo en la banca, vio como Adama Traoré abrió el marcador para los “lobos” en los 80 minutos de partido.
Cuando se jugaban los minutos de descuento del compromiso y los “ciudadanos” empujaban por el empate, el mismo Traoré sentenció el resultado para la visita, a los 90+4′.
Con la derrota, Manchester City se estancó en el segundo puesto del torneo con 16 puntos, quedando a ocho unidades del líder Liverpool.
Por su parte Wolves, trepó a la undécima ubicación de la tabla de posiciones con 10 puntos.