A las 9:27 horas (13:27 GMT) de este miércoles Marcelo Salas pisó nuevamente el Caracol Azul para iniciar su segunda etapa como jugador de Universidad de Chile, una presencia que arrastró una veintena de hinchas y generó una custodia de seis carabineros en el recinto de entrenamiento, vecino al Estadio Nacional.
Tras su llegada al reducto, Salas se dirigió al camarín para conversar durante unos 20 minutos con sus nuevos compañeros, después de lo cual se sumó a la práctica.
Con evidente buen ánimo, el ex ariete de River Plate, Lazio y Juventus efectuó el trote con el resto del grupo y luego se separó para trabajar aparte con el preparador físico Marcelo Canessa.
Terminada la sesión matinal, Salas expresó su felicidad por su reencuentro con el club que lo vio partir en 1996 a una exitosa carrera en el extranjero.
"Bien, ya estoy integrado totalmente a los entrenamientos con el plantel. Me recibieron muy bien, conocía a muchos desde hace tiempo y contento de poder integrarme, empezar a entrenar y ponerme a punto en lo físico y futbolístico", sostuvo.
El delantero confesó que su vuelta a los camarines del reducto azul le resultó "un poco extraño, pero es algo que me hace sentir bien, me siento muy cómodo acá y al volver nuevamente al Caracol se vienen todos los recuerdos de los años que estuve acá".
"En este momento lo principal es que me siento bien, contento, y que después venga todo lo que espero yo y lo que esperan todos de buenos resultados y rendimiento por la U", agregó.
El goleador, que informó que no hablará con la prensa los martes y jueves para estar más tiempo con sus hijas, anticipó que si bien su prioridad es jugar por el cuadro universitario, no tendrá inconvenientes en acudir un llamado de Nelson Acosta para defender a la selección chilena.
Salas trabajará en doble jornada para su esparado debut del 18 de agosto en un amistoso contra Boca Juniors. (Cooperativa.cl)