Para las 20:30 horas (00:30 GMT) del sábado 11 de septiembre estaba pactado el duelo por la Primera B entre San Luis y Lota Schwager. Sin embargo, inesperadamente el cuadro sureño no llegó a la cita debido a múltiples retrasos que sufrió en su viaje de 14 horas desde la ciudad del carbón. Esta es la increíble historia.

 

A las 07:00 horas (11:00 GMT), el cuadro lotino se juntó en el Estadio "Federico Schwager" con la ilusión de desplazarse a Quillota para cumplir con el club que les da la oportunidad de jugar en la segunda división del fútbol chileno.

 

Sin embargo, la vida del club carbonífero va de la mano con la sufrida gente que habita Lota y es que desde que se cerraron los piques que sustentaban la ciudad, el cuadro ha tenidos más frustraciones que esperanza.

 

Cuando se acercaban a Chillán, el bus que trasladaba a los esforzados jugadores de Lota sufrió el pinchazo de un neumático. Las cosas no mejoraron, puesto que cuando recién salían de Talca, una segunda rueda provocó la detención.

 

Los problemas parecían solucionados, pero increíblemente cuando se acercaban a Santiago se les acabó el petróleo, y pese a que se encuentran cuatro meses sin recibir los emolumentos, los mismos jugadores debieron costear de su bolsillo la compra del combustible.

 

El atraso era ya un hecho y a esa altura el técnico de Lota, Juan Martínez se comunicó con René Gatica, gerente técnico de San Luis por el atraso. Esto obligó al juez Braulio Arenas a pedir instrucciones a la ANFP y el director de operaciones de la comisión arbitral, Salvador Imperatore, le indicó que esperara la llegada de la delegación sureña.

 

Ahora sí. Estaban encaminados a Quillota, no obstante faltaba otra sorpresa.

 

El chofer del bus no sabía cómo llegar a la ciudad de las chirimoyas y tomó un camino equivocado hasta llegar a … Casablanca. Allí debió cambiar la ruta para llegar a Quillota después de 14 horas de viaje y con una hora de atraso.

 

Arenas, consciente de las complicaciones de Lota, les hizo calentar durante 15 minutos para luego entrar a la cancha.

 

Marco Muñoz, uno de los jugadores más experimentados de Lota, comentó a Al Aire Libre en Cooperativa sus impresiones respecto a lo vivido.

 

"No lo llamaría fútbol profesional. Este es un fútbol amateur porque las condiciones que nosotros tenemos son mínimas y así no se puede competir. Llevamos cuatro meses sin cobrar un sueldo, sin cancha para entrenar, sin ropa", dijo el jugador.

 

Para colmo, después de la ingrata experiencia, San Luis derrotó por 3-1 a Lota… Además, el cuadro sureño erró un penal.