Magallanes sacó a relucir su condición de equipo profesional y goleó por 5-1 al combinado regional amateur de Punta Arenas, en lo que fue el duelo de revancha válido por la fase preliminar de la Copa Chile.
Ambos equipos brindaron un entretenido partido en la remozada cancha del Estadio “Santiago Bueras” de Maipú, donde inclusive los magallánicos tuvieron que jugar durante casi todo el segundo lapso con nueve hombres, producto de la expulsión de dos jugadores.
Como dato curioso, los postes se transformaron en protagonistas del cotejo, ya que en seis oportunidades salvaron al portero patagónico después de sendos ataques del cuadro santiaguino.
El técnico Osvaldo Hurtado sabía que la responsabilidad recaía en sus dirigidos y arrancaron el encuentro decididos a asegurar la clasificación en el remozado Estadio “Santiago Bueras” de la comuna de Maipú.
Fue así como a los 39 minutos, el volante Cristóbal Jara apareció destapado en plena área chica para conectar un cabezazo que se fue al fondo de las redes patagónicas.
Cuando todavía el cuadro dirigido por Rodolfo Rogel no se reponía del impacto, al minuto siguiente Jacob Avila anotó la segunda conquista con una lucida maniobra.
La tónica fue la misma después del descanso, con un conjunto albiceleste decidido a decretar cifras tranquilizadoras, pero se topó con la inesperada expulsión del mismo Jacob Avila por un irresponsable golpe contra un defensor rival.
Aún así, la escuadra local persistió en su dominio y lo tradujo en la tercera anotación a través de Guillermo Corominas a los 48 minutos de juego.
El cuarto gol llegó a los 67 minutos tras una monumental “patriada” del defensa central Carlos Galleguillos que culminó con una espectacular chilena.
Pero los puntarenenses no querían volver con las manos vacías y consiguieron un merecido descuento a través de Gerardo Zapata a los 73 minutos de juego, después de aprovechar una grosera falla del portero Fabían Seguel.
Ya cuando el partido finalizaba y “la bandita” de Magallanes festejaba el triunfo llegó la quinta conquista por intermedio del ingresado Manuel Pereira, para conseguir una goleada de proporciones del cuadro albiceleste.
De esta manera, Magallanes avanzó a la siguiente ronda en la Copa Chile, donde se verá las caras con un equipo de Primera B.