El "nuevo" Luis Figo, ahora en las filas de Inter de Milán italiano tras abandonar Real Madrid, es la atracción de la selección portuguesa de fútbol, que este miércoles enfrentará al combinado de Egipto en partido de preparación para el Mundial de Alemania de 2006.

 

El ex mediocampista del club español llegó el lunes a Portugal, donde fue recibido como la estrella del equipo y se espera que luzca la jineta de capitán ante el equipo norteafricano, en un choque que servirá para medir el estado de forma de los actuales subcampeones de Europa.

 

Figo mantuvo un encuentro nada más llegar a Portugal con el seleccionador, el brasileño Luiz Felipe Scolari, en el que el astro luso comentó con el técnico su paso al equipo italiano y su estado de forma.

 

Dijo sentirse ilusionado en su nueva etapa en el cuadro lombardo, ya que como aseguró se trata "de un club de prestigio que me permite continuar al más alto nivel".

 

Afirmó sentirse un poco retrasado en relación a sus nuevos compañeros, pero explicó que se encuentra mucho mejor que hace una semana, cuando llegó a Inter.

 

Sobre la clasificación de Portugal para el Mundial de Alemania, Figo señaló que "se está en el buen camino", y que su selección cuenta con expectativas de estar presente en esa cita.

 

Scolari tuvo que recurrir a última hora a los jugadores Luís Boa Morte (Fulham de Inglaterra) y Joao Alves (Sporting de Braga) para sustituir a Cristiano Ronaldo y al joven Custodio, ambos lesionados en un entrenamiento para el partido frente a Egipto.

 

Custodio, de 22 años, abandonó la concentración luego que se le diagnosticó una lesión en la rodilla que puede mantenerle alejado de los terrenos de juego durante algunas semanas, mientras que Cristiano Ronaldo sufrió molestias musculares.

 

Portugal es líder del Grupo 3 europeo con 20 puntos y ocho compromisos jugados, por delante de Eslovaquia, que cuenta con 17, y Rusia, la tercera ubicada con 14, pero con un encuentro menos.

 

El duelo de este miércoles, que se celebrará en la isla de Ponta Delgada, en el archipiélago de las Azores, forma parte de la preparación para el Mundial de Alemania 2006. (EFE)