El portero de Universidad de Chile Cristóbal Campos manifestó una gran preocupación en medio de los incidentes del clásico estudiantil ante Universidad Católica, por el estadio de su familia.

El partido se suspendió producto del lanzamiento de bengalas y fuegos artificiales, situación que fue controlada por Carabineros, esto desde la tribuna Pacífico del Estadio “Ester Roa” de Concepción.

Justamente en ese sector estaban los cercanos de Campos y varios otros futbolistas de la U, por lo que evidentemente se vio urgido en su estado de ánimo.