Sao Caetano fue sancionado con la pérdida de 24 puntos en el Campeonato Brasileño, mientras su presidente y su médico fueron suspendidos por su presunta responsabilidad en la muerte del zaguero Serginho, a raíz de una afección cardíaca, en el Estadio Morumbí de Sao Paulo, el 27 de octubre.

 

Con la resta de unidades, Sao Caetano, que era tercero en la clasificación del torneo con 77 puntos y uno de los tres que aún tenían posibilidades de conquistar el título a dos jornadas del final, cayó al decimoquinto puesto con 53.

 

Las sanciones de primera instancia fueron anunciadas este martes por el Superior Tribunal de Justicia Deportiva de Brasil, que consideró que el club, su timonel, Nairo Ferreira de Souza, y el doctor Paulo Forte permitieron que Serginho jugase a sabiendas de que sufría problemas al corazón.

 

Ferreira fue suspendido de trabajar en el fútbol por 720 días (dos años) y Forte, por 1.440 días (cuatro años).

 

El zaguero Paulo Sergio de Oliveira "Serginho", de 30 años, cayó fulminado por un paro cardíaco cuando su equipo jugaba con Sao Paulo un partido del Campeonato Brasileño.

 

Las investigaciones de la Policía Civil y del Superior Tribunal de Justicia Deportiva apuntan a que el club sabía que el jugador sufría una cardiopatía hipertrófica asimétrica, enfermedad que provoca hinchazón del corazón y que fue detectada en febrero pasado durante un examen de rutina, y aun así lo alineó en 47 encuentros.

 

La pérdida de puntos dejó a Sao Caetano fuera de la Copa Libertadores 2005, para la cual ya estaba prácticamente clasificado, y su lugar puede ser ocupado por Palmeiras, que le seguía en la tabla.

 

Los abogados de la institución dijeron que apelarán al fallo, pero algunos miembros del tribunal deportivo señalaron que es sumamente difícil que la decisión sea anulada. (EFE)