Luego del empate 0-0 ante Fluminense, donde Gary Medel fue expulsado, Vasco da Gama descargó su furia por el arbitraje en el torneo carioca y expuso sus exigencias a las autoridades futbolísticas al sentirse perjudicado en los últimos partidos.

"Es repugnante presenciar un nuevo espectáculo manchado por un nuevo arbitraje, al menos por cuarta vez consecutiva, de bajísima calidad y cuestionable", señaló el club en redes sociales, donde además lamentó la situación del torneo estadual y un "declive de un campeonato que alguna vez fue, y tenía todo para ser, el más grande de Brasil".

El "Gigante da Colina" anunció que pedirá a la Federación de Río de Janeiro, "entre otras exigencias, que suspenda al árbitro Sr. Bruno Mota Correia". Junto con ello, se solicitará "informes a la empresa contratada para analizar el arbitraje de todos los partidos de Vasco en el campeonato".

Vasco espera soluciones ante "problemas crónicos con arbitraje cuestionable. Es urgente tomar acciones efectivas e inmediatas y no más reuniones y promesas".

Incluso, hubo palabras para el estado de la cancha en el Maracaná bajo una intensa lluvia: "Es vergonzoso ver el césped de un importante templo del fútbol en malas condiciones de conservación y mantenimiento por parte de sus incompetentes administradores".

El propio Gary Medel, capitán del equipo, replicó el mensaje del club por medio de sus historias de Instagram, plegándose a la molestia de Vasco. El próximo partido, con el "Pitbull" como baja, será ante Botafogo este domingo 18 de febrero a las 16:00 horas de Chile.