El alemán Alexander Zverev (5° de la ATP), tercer cabeza de serie, mantuvo su racha triunfal en el Masters 1.000 de Cincinnati al vencer en la final al ruso Andrey Rublev (7°), cuarto sembrado, por 6-2 y 6-3 y proclamarse nuevo campeón.
El partido entre ambos tenistas, el quinto como profesionales, no tuvo más historia que confirmar el gran dominio que tiene el tenista alemán sobre el ruso al que le ha ganado todos los duelos.
Zverev, que llegó al torneo sin haber ganado nunca un partido en Cincinnati, se erigió como el mejor con un tenis poderoso y consistente, que le permitió acabar con Rublev, el verdugo del favorito, su compatriota Daniil Medvedev, en la semifinal, en apenas 59 minutos de acción.
El tenista alemán, que no había podido ganar nunca en las seis participaciones anteriores en Cincinnati, se marchó con el cuarto título de la ATP en lo que va de temporada.
Rublev, que disputó su segunda final de Masters 1000, después de haber disfrutado de una carrera hacia el partido por el campeonato en Montecarlo en abril, al final siguió sin conocer el triunfo.
Pero al final no pudo ver cumplido su sueño y objetivo de convertirse en el sexto ruso diferente en ganar un título de Masters 1000 desde que comenzó la serie en 1990 y el sexto campeón diferente en este nivel esta temporada.