Más oscuro que nunca se tornó el panorama del equipo chileno de Copa Davis con miras a su primer compromiso en el Grupo Mundial frente a Rusia, pues todo indica que Nicolás Massú no llegará en condiciones de jugar ese match, a causa de la fractura por estrés que sufrió en el quinto metatarsiano del pie izquierdo.
Así lo reconoció este sábado el médico del equipo nacional, Alejandro Orizola, quien en diálogo con Al Aire Libre en Cooperativa aseguró que "no es aconsejable" que Massú juegue el lance a disputarse entre el 4 y el 6 de marzo en Moscú, en atención a los plazos de recuperación que le tomará el tratamiento.
"El problema básico es que va a estar tres semanas sin hacer nada, porque esta patología requiere reposo. Si es que estuviera en condiciones de llegar, tendría que jugar al tiro en superficie dura y eso no suena como algo muy aconsejable", manifestó Orizola.
De todos modos el facultativo admitió que la decisión final "la va a tomar él (Massú) una vez que le demos el alta, esperamos que dentro de las tres semanas que establecimos como tiempo de evolución".
De momento Nicolás Massú ya quedó descartado para los torneos de Viña del Mar (31 de enero al 6 de febrero), Buenos Aires (del 2 al 7 de febrero) y Costa de Sauípe (14 al 20 de febrero).
"Eso ya es definitivo", subrayó el galeno, agregando que para la Copa Davis el chileno apenas contará con dos semanas de preparación, puesto que el pleito con los rusos arranca el 4 de marzo.
Orizola indicó que Massú ya inició el tratamiento para mejorar de su dolencia, que se vio agudizada tras disputar el Abierto de Australia, donde debió retirarse el pasado 19 de enero cuando caía por 0-6 y 0-2 en su duelo por la segunda ronda ante el alemán Philipp Kohlschreiber.
"Tiene el pie derecho inmovilizado con una bota de yeso y estará así al menos una semana. La próxima tenemos planificado trabajo de musculatura para fortalecer el tren superior y la siguiente, trabajo en gimnasio, hasta que los exámenes permitan ver si tiene movilidad en la zona", señaló.
El médico explicó que la dolencia del tenista viñamarino "es una patología bastante frecuente en los deportistas, lo malo es que hay que esperar a que el hueso se repare y eso lleva tiempo".
"Se genera producto una fatiga de material. El hueso no se rompe en dos partes como en las fracturas convencionales, acá el daño se produce en la arquitectura interna del hueso, por ende, es de muy difícil diagnóstico, porque no hay imágenes positivas de la lesión", ahondó.
"La manera de recuperarlo es con reposo y estimulando al hueso para que pegue, pero los plazos de evolución son inalterables", subrayó. (Cooperativa.cl)