Roger Federer (2°) dio muestras de que su enorme talento sigue intacto y que está en condiciones de pelear por recuperar el número uno del mundo, al avanzar de manera impecable a semifinales del Abierto de Australia.

Con un juego sin fisuras, el suizo despedazó al argentino Juan Martín del Potro (6°), por 6-3, 6-0 y 6-0, en apenas una hora y 20 minutos.

En semifinales su rival será el estadounidense Andy Roddick (9°), sobre quien tiene una clara ventaja de 15-2 en enfrentamientos personales.

 

Una faena brillante

Federer desde un comienzo se mostró inabordable. Su servicio funcionó en cada momento y casi no le dio opciones de ganar puntos al tandilense en todo el partido.

Imagen
El helvético estuvo intratable ante el argentino. (Foto: EFE)

Por el contrario, atacó con su exquisito y variado repertorio el saque del trasandino, quien sólo pudo defenderlo en tres juegos a lo largo del compromiso. Ya en el cuarto game, Del Potro sucumbió ante el quiebre del suizo, pese a haberse defendido con fiereza.

De ahí para adelante lo que vino fue una exhibición de los geniales golpes de Federer, que regaló tiros para todos los gustos e incluso se dio el lujo de juguetear con un cabezazo ante una respuesta del sudamericano que quedó flotando.

A partir del primer game del segundo set, el europeo encadenó seis rompimientos para sellar con dos 6-0 su paso a semifinales, ante un Del Potro atónito y un público australiano rendido a los pies de un suizo que se vio más perfecto que nunca.

 

El próximo desafío

Roddick debe haber quedado preocupado con la presentación de su “bestia negra”, aunque se ha visto bastante sólido en esta edición del primer Grand Slam del año.

El de Nebraska sacó del camino nada menos que al tres del mundo y campeón defensor, el serbio Novak Djokovic, quien abandonó en la cuarta manga, cuando perdía por 7-6 (3), 4-6, 2-6 y 1-2.

El norteamericano intentará batir al poderoso Federer, que parece convencido de reclamar su corona en el Melbourne Park.