Universidad de Chile está obligada a mirar más allá de su buen presente. Mientras el plantel busca conseguir el paso a la siguiente fase en la Copa Sudamericana ante Alianza Lima, la dirigencia ya piensa en 2026 con una pregunta inevitable: ¿vale la pena sostener una delantera que nunca despegó?
Los números son lapidarios y la paciencia se agotó en el CDA. Lucas Di Yorio, Rodrigo Contreras y Nicolás Guerra no convencieron, y la próxima temporada se vislumbra un recambio profundo en la ofensiva azul.
🔥 La U prepara adiós a su tridente ofensivo
El caso más evidente es el de Di Yorio. Tal como informó En Cancha, el delantero argentino llegó como apuesta estelar, pero nunca cumplió con las expectativas y Azul Azul está pensando en no activar la cláusula automática de compra y su elevado sueldo lo transforma en un problema más que en una solución.
Rodrigo Contreras, por su parte, deja números que no convencen: 8 goles en 27 partidos. Una media demasiado baja para justificar los 1,5 millones de dólares de inversión. En tanto, Nicolás Guerra vive una historia distinta, pero con el mismo desenlace: pese a su formación en la U y su importancia en clásicos, no logró consolidarse como titular indiscutido y hace varios mercados que está mirando fuera de la U.
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