Casey Phair, jugadora de la selección de Corea del Sur, se convirtió este martes, con su debut ante Colombia, en la jugadora más joven de la historia en jugar una Copa del Mundo, con solo 16 años y 26 días.

"Estaba muy, muy nerviosa. Fue un momento aterrador, pero después de continuar y seguir corriendo, creo que simplemente me tranquilicé", dijo la jugadora tras el partido.

La futbolista superó así a la nigeriana Ifeanyi Chiejine, que en 1999 debutó con 16 años y 34 días.
Phair, de padre estadounidense y madre surcoreana, entró al terreno de juego en el minuto 78 de partido del duelo que Corea perdió en su primer encuentro del Mundial ante Colombia por 2-0.