Por Héctor Parraguirre J.

 

La llegada del venezolano David Nodá a Boston College marcó un hito en el voleibol chileno, pues nunca un jugador de ese país, poseedor de un nivel largamente superior al nacional, había reforzado a un equipo local. Pero el hecho de pasar a una competencia de inferior categoría, más aún cuando viene de actuar en la Superliga de España, no lo desmotiva, todo lo contrario.

 

Para este oriundo de Valencia en el estado de Carabobo, de 25 años y 1,97 metro de estatura, el desafío es confirmar la calidad de los exponentes "llaneros" y contagiar a sus nuevos compañeros de una actitud aguerrida que considera carecen los voleibolistas de Chile.

 

"Lo único que le falta al voleibol chileno es la agresividad, que es lo que tiene el voleibol venezolano. En cuanto a altura y a nivel de jugadores yo creo que están parejos con cualquier equipo, la diferencia está en la actitud, aquí juegan muy callados, muy relajados. Nosotros jugamos con la sicología del contrario, le gritamos, le decimos cualquier cosa para ver si se pone bravo y se sale del juego. En cambio aquí no, hacen un punto y respetan al contrario, les hacen un punto y también, se mantienen así", analizó.

 

"Esa es la diferencia con nosotros, si estamos perdiendo gritamos y si vamos ganando gritamos más y uno siente como que el otro equipo se disminuye. Eso es lo que estoy tratando de hacer, que jueguen como nosotros, para que vayan soltándose, porque uno a medida que vaya jugando emocionado se crece más y le empiezan a salir las cosas mejor", agregó.

 

¿Qué siente al ser el primer venezolano en jugar por un cuadro chileno?

"Al principio me sentí con una responsabilidad grande, porque oye, primera vez un venezolano, uno tiene que defender el nombre que tiene Venezuela y eso es lo que voy a tratar de hacer".

 

De España a Maipú

 

El histórico fichaje de Nodá se gestó gracias a su venida a Chile con la selección de voleibol playa de su país. Allí lo vio el entrenador del equipo femenino de Boston College, Aldo Dadea, quien hizo los contactos para su contratación.

 

Así, el seleccionado "vinotinto" en cuatro torneos sudamericanos y mejor jugador de los Juegos del Alba 2005 en Cuba, pasó de defender a Textiles de Santander en la Superliga de España a convertirse en la esperanza del elenco maipucino para conquistar la Liga Nacional, como lo expresó el presidente del club, Francisco Martínez.

 

"Espero que se quede acá en Chile y sea uno de esos jugadores internacionales que viene a aportar y terminan viviendo en el país. Ojalá que lo haga, porque es un jugador fuera de serie", comentó el timonel de Boston.

 

¿David, cómo tomó esto de venir a Chile?

"La verdad no lo esperaba, porque yo estaba entrenando para irme otra vez a la liga de España, pero entonces como nunca había venido para acá, lo tomé como otro reto".

 

¿Cuáles son sus expectativas con Boston College en la Liga Nacional?

"Considero que el equipo de Boston en comparación con todos los que hemos jugado anda bien y creo que una vez que hagamos conjunto, nosotros debemos estar en la final".

 

El presidente de Boston tiene la idea de que sean campeones, ¿están preparados para asumir ese desafío?

"Sí, una vez que se incorpore mi otro compañero de Venezuela y logremos (afianzar) el conjunto, que todavía no lo hacemos, yo digo que estaremos en la final. Ahora, tendremos que ver a los contrarios, pero no estamos lejos de ser campeones".

 

Nodá se refiere a su compatriota Carlos Tejeda, también proveniente de la Superliga de España, donde disputa las semifinales con Unicaja Almería.

 

Apenas finalizada la participación del cuadro ibérico, Tejeda se unirá a Boston College (se estima que en mayo) para convertirse en el segundo "llanero" en actuar en el voleibol nacional, algo no menor si se toma en cuenta que Venezuela fue campeón en los últimos Juegos Panamericanos de Santo Domingo 2003. (Cooperativa.cl)