La ex número uno del mundo y cuatro veces campeona de Roland Garros, la belga Justine Henin, asistió a la final del International Challenger de Beijing, desde donde viajó a Lhasa, capital de Tíbet, para participar en varios actos de promoción del tenis.

La belga, quien concretó su retiro definitivo el 26 de enero de 2011 (hubo un primer anuncio en mayo de 2008), es una de las jugadoras más queridas en el gigante asiático, circunstancia que aprovechan los organizadores de torneos como el Abierto de China (del 5 al 9 de octubre) o el International Challenger para promocionarse.

Henin hizo una fugaz visita a la capital china, donde aseguró que el nivel del tenis en el país "ha crecido mucho" y declaró que figuras como la de la vigente campeona de Roland Garros, Li Na, "pueden servir de inspiración a muchos jóvenes deportistas".

Desde Beijing, la que también fuera oro olímpico en Atenas 2004, se desplazó hasta Lhasa, capital de Tíbet, que ha estado cerrada al turismo durante el mes de julio por los actos de conmemoración del 60 aniversario de la entrada de China en la región.

En la capital tibetana y hasta fines de esta semana, Henin participará en actos destinados a promover el deporte en general y el tenis en particular, así como visitará algunos de los recintos deportivos construidos por el gobierno chino en los últimos años.