Jorge Sampaoli, ex técnico de la selección chilena y actual entrenador de Sevilla, tiene como anhelo dirigir a la selección argentina, algo que, según sus cercanos lo tendría dispuesto a hacer "cualquier cosa", e incluso, dicen en Buenos Aires, tener dualidad de funciones.

"Se muere por agarrar la Selección y si le llegaran a ofrecer el cargo haría cualquier cosa con tal de aceptar", contó un cercano al entrenador al diario argentino Olé.

"Cualquier cosa" se remite a las dos opciones que tiene el casildense para asumir el mando de la albiceleste. La primera implica negociar el término del contrato con Sevilla buscando una salida en buenos términos, ya que en primera instancia firmó con el equipo español hasta junio de 2018 y donde tiene una clausula de salida por cinco millones de dólares.

Debido a lo anterior, es improbable que la Asociación de Fútbol Argentina, resquebrajada por las peleas internas y con múltiples problemas económicos, pueda hacerse cargo de afrontar el gasto que significaría rescindir dicho vínculo.

La segunda alternativa lo tendría dirigiendo el club y la selección al mismo tiempo hasta mediados del 2017, dado que el próximo año se activa una condición en su trato para que pueda migrar si es requerido por un seleccionado nacional.

Lo anterior se ve potenciado por el primer contacto del técnico campeón de América con dirigentes de la AFA.

En la eventualidad, Sampaoli junto a la selección trasandina deberán disputar ocho compromisos por las Clasificatorias (dos en septiembre, dos en octubre, dos en noviembre y dos en marzo del 2017).

Esta alternativa es similar a lo que realizó el holandés Guus Hiddink el 2009 cuando asumió al frente de la selección de Rusia y también dirigía a Chelsea de Inglaterra.